Existe un comentario generalizado en Internet de que «el contenido es el rey».
La realidad puede diferir sustancialmente de lo que nos indica este mensaje por varias razones, y llevarnos una decepción cuando vemos que un contenido original, fresco, amplio y cuidado se sitúa en google por debajo de un contenido que, a primer golpe de vista, es bastante peor.
¿Es realmente necesario tener un contenido de calidad para posicionar en Google?
Elementos con los que hay que contar
Lo que tenemos que tener en cuenta es que google se basa en 200 criterios, y si bien el SEO interno suele ser más que necesario, no siempre es el primer elemento a tener en cuenta ni el más importante a ojos de los motores de búsqueda.
Cuidado con este tipo de acciones porque no pocas veces el enfoque inadecuado puede suponer que el tiempo y el esfuerzo que se dedica a este tipo de acciones nos ea compensado con los resultados obtenidos.
Este trabajo ha de ser una mezcla de beneficio obtenido con esfuerzo aplicado, y si bien ha de cumplirse con un umbral, exagerar en la perfección no compensa.
Este es el momento de hacer un estudi en profundidad para desvelar este tipo de incógnitas, y de pasar al siguiente elemento.
Qué es un buen contenido
Un buen contenido es aquel que está dedicado a la conversión onpage. Es decir, que el contenido no debe realizarse para gustar a google, sino para gustar al visitante y lograr su conversión en cliente. Dicha conversión puede ir desde bajarse un pdf a que nos manden un correo electrónico, y no estar simplemente enfocado a lograr que ese cliente potencial nos compre algo online.
Un error bastante frecuente suele ser el orientar exclusivamente la web a los buscadores, tratando de lograr porcentajes «adecuados» de palabras calve, de negritas, de subrayados o de cursivas. La realidad es que todo eso no sirve de nada, sino que los elementos que google prioriza son otros, y especialmente el SEO externo.
Por esta razón, un buen contenido enfocado al visitante es la calve de lograr una buena posición. Todo lo demás puede llegar a ayudar en el mejor de los casos o en un futuro hipotético, pero el tiempo que se pierde hace que no merezca la pena en absoluto.